jueves, 24 de febrero de 2011

(S) Sega Mega Drive



Después de la pequeña derrota frente a Nintendo en la batalla de los 8 bits, Sega decidió dar el salto a los 16 bits, y ahora, si acertaron.

Nos situamos en Japón, concretamente en 1988, un grupo de personajes de ojos rasgados, trasladan los arcades de las máquinas recreativas a un aparato más pequeño que un VHS, y lo mejor de todo es que te lo puedes llevar a casa. Imaginad lo que provocó aquello.


Sega dio un golpe de efecto al crear, la que llamarían Sega Génesis, aunque en Europa se la conocería como Sega Mega Drive.


Con una potencia gráfica impresionante (veníamos de ver paletas de colores en 8 bits), y un sonido a la par, fue el auténtico éxito de Sega. Los juegos lucían mas coloridos que nunca, más detalle, más fluidez de movimientos, mejor música... A los ojos de un niño esto era increíble.

El catálogo de Mega Drive, envidiable, relevaron a Alex Kidd, y crearon a un erizo de color azul con muchísimo más carisma que el ¿duende? de Master System. Su nombre, Sonic. Además de esto, juegos de deportes, conducción, lucha, vistas laterales, cenitales... en fin, un mundo totalmente nuevo.

Este cambio tan drástico a la hora de crear juegos nos vino genial a todos, Nintendo tenía que ponerse las pilas para no quedarse atrás, y tendría que crear videojuegos que compitieran con los de Sega.

Pero no todo son buenos recuerdos, dos años mas tarde desde su lanzamiento, empezaron los problemas.
Mega Drive II con el MegaCD y 32X
Creo que Sega se dio por ganador, y ver a su contrincante Nintendo por los suelos le llenó de poder. Pero cómo dicen por estas tierras "El que mucho abarca poco aprieta", y en definitiva esto es lo que le paso a Sega. Al ver a Nintendo vapuleada en el mundo de los cartuchos de 16 bits, Sega lanza el MegaCD con intención de noquear a Nintendo, un armatoste que se colocaba debajo de la consola y que permitía cargar juegos en formato CD, catalogo muy pobre y precio alto, un fracaso. Pero bueno, a Sega aún le quedaban vidas extras, y un año después, apuesta por el Sega 32X, un periférico que se colocaba en la ranura de juegos y que permitía cargar juegos en 3D. Mismo resultado que el MegaCD.

Mientras Sega tropezaba, Nintendo seguía agazapada apoyando a su Super Nes y experimentando con el mundo de los 64 bits, mientras tanto Sega quería seguir arriba e hizo la que creo su peor apuesta, Sega Saturn. Pero esto ya es otra historia.

Personalmente Mega Drive me trae muy buenos recuerdos, Sonic, Streets of Rage, Shinobi, Fifa... Recuerdo el mando gigantesco que traía por defecto (recordad que eran manos de niño). Pude disfrutar de ella unos cuantos veranos, Frigo Pie y Mega Drive, que podía fallar.



Como curiosidad, en Brasil se sigue desarrollando Mega Drive, creo que van ya por la cuarta versión, pero si os queda lejos, podéis descargar el emulador y disfrutarla en vuestro ordenador.

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